Ecoansiedad o Solastalgia qué es?. Empezamos por su definición
La American Psychology Association (APA) describe la ecoansiedad como “el temor crónico a sufrir un cataclismo ambiental que se produce al observar el impacto del cambio climático y la preocupación asociada por el futuro de uno mismo y de las próximas generaciones”.
El cambio climático es una realidad y amenaza el futuro de la Tierra. Esta circunstancia puede tener impactos psicológicos en algunas personas, un fenómeno conocido como ecoansiedad o Solastalgia,  que es un neologismo que describe una forma de angustia, estrés mental o existencial causado por el deterioro medioambiental.

Ecoansiedad o Solastalgia qué es?

Las personas más concienciadas con la ecología y el medioambiente son las más propensas a sufrir ecoansiedad, probablemente provocado por la inacción de la humanidad, incapaz de ver lo evidente:  La ecoinconsciencia.

Negacionismo

Hay corrientes negacionistas que sin ninguna evidencia científica, descreen del cambio climático y hablan de cambio de escenario económico, activismo político y adoctrinamiento. En solo un punto coincido con ellos,  hablan de la nueva economía y poderes que se concentran en lo verde,  cambiando de amo pero no de collar.  Son obviamente los que están en contra del pacto verde Europeo. 

Postura de la ultraderecha española: “Durante unos minutos voy a dar por bueno su dogma de que el cambio climático, cuya existencia es innegable, tiene origen en las emisiones de CO2 provocadas por el hombre”. Esta fue la entradilla con la que Santiago Abascal dio inicio en la moción de censura de finales de octubre al apartado dedicado al medio ambiente. También ha hablado de  “camelo climático”. Vox trata de vender la idea de que España es “un pagafantas ecologista” El Confidencial 

El consumo

Está claro que aunque cambiemos hábitos de consumo, extracción, producción, implementación de economía circular llegamos tarde y no es suficiente si no frenamos el consumismo voraz,  y hemos visto pospandemia que el sistema capitalista no permite desaceleración, vamos desbocados hacia el colapso,  porque el freno no es una opción  si se ha basado la sociedad en el consumo como símbolo de  éxito y felicidad.

La sociedad ha demostrado ser inconsciente,  egoísta y cómoda, ¡que lo haga el otro!. Hemos visto que el aire se limpió durante el confinamiento y volvimos al mismo lugar…. Hemos visto en pandemia la importancia de la sanidad pública y la investigación, incluso se ha aplaudido a los sanitarios, pero no veo a nadie apoyándolos en sus reivindicaciones, que son las de toda la sociedad. Por el contrario, han aumentado las agresiones a sanitarios, los seguros privados  y  la desconfianza hacia la ciencia.

Seguimos consumiendo por encima de nuestros recursos, porque aunque el litio sea una solución al petróleo y a las emisiones de gases contaminantes (estoy a favor de la movilidad sostenible y las smart cities), no es sostenible a largo plazo, porque no deja de ser un recurso natural finito,  y ya sabemos lo que sucede cuando un recurso escasea (guerras, intervenciones militares para restablecer el orden  o como lo quieras llamar. Véase Coltán). Tampoco está claro si las baterías obsoletas,  no se convertirán como sucede con la tecnología, en basura electrónica…. Lo mismo sucede con la ganadería extensiva y como solución pasarnos a lo verde, el monocultivo y la deforestación serían las consecuencias. En conclusión somos muchas bocas que alimentar, necesitamos dos planetas para abastecer a tanta población mundial.

La sobrepoblación

Los más consientes, los que abrieron los ojos y contactaron con la realidad, que es que ni una zoonosis  a gran escala por destrucción del medioambiente,  ha servido para cambiar el rumbo de la humanidad, notamos que el ecocidio es flagrante. ¡Mira como crece la población mundial en directo en enlace! Ni una pandemia global, ni la economía y el medio ambiente en caos, ni el movimiento  Childfree  ha reducido la natalidad. Incluso con una pandemia mundial  sigue siendo mayor la natalidad  que la mortalidad. Somos una especie insostenible

Está todo escrito

Recuerdo  las películas de ciencia ficción que veía con mi padre de pequeña….. Dictaduras verdes se presentan como única salvación, nunca una autocracia es la solución, pero hay mucha gente que además de ignorante de la ecología y el medioambiente, también lo es de la historia.

Racionalizar la comida, producir  sustitutos alimentarios, vender aire embotellado, virus zoonóticos, control de fronteras,  control de natalidad. La implementación del ecofascismo no resulta tan descabellado como en las películas que veía con mi papá. Incluso se presentará como una solución a una sociedad humana cómoda e irreflexiva. Probablemente la pandemia ha servido como ensayo. Ver Biopolítica de Foucault

Pero no solo la ciencia, la ciencia ficción como arte, sino incluso las religiones hablan de lo que muchos vemos venir  y nos provoca ecoansiedad.

El mundo no se va a acabar de la noche a la mañana como se representa en el cine de taquilla, pero cada día se convierte en un lugar menos amable y habitable, en un infierno terrenal en el que nos asfixiaremos, abrazaremos, ahogaremos  y moriremos lenta y agónicamente junto a Gaia, sencillamente porque somos parte de ella. El despertar de la humanidad es la única esperanza real.

Más en sección ecología ecocidio Vaquera del espacio

Te puede interesar

  • Cómo saber si padeces «ecoansiedad» (y qué puedes hacer para combatirla) BBC
  • 1984 novela George Orwell  

Punto de no retorno. Calentamiento global