Los domingos de cine son un clásico en mi casa,  hoy quiero recordar una película que en su momento me ayudó en la toma de decisión de emigrar: Martín Hache. Porque la cultura abre las puertas de tu mente a la libertad de pensamiento.

Como ayer dijo claro y contundente Blanca Portillo en la Sexta Noche: Tenemos la obligación de ser críticos con lo que sucede. Una gran verdad, porque la cultura nos ayuda a reflexionar.  Ahuyenta la manipulación a la que estamos sometidos , ofreciendo otros matices de la misma realidad en la que estamos inmersos. Como disparador a tus palabras estimada Blanca, recordé una película que a nivel personal, ha sido un antes y un después en mi forma de pensar. Prometo en breve ir al cine a ver «Secuestro» y gracias por llevar como bandera tus ideales y defenderlos sin miedo, admirable actriz Española que ayer pronunciaba sin titubeos estas palabras  «La cultura siempre ha sido un sector peligroso para el poder».

El cine herramienta de cambio social

Martin Hache es un film Argentino del año 1997, dirigida por un grande del cine y muy crítico,  Adolfo Aristarain. El reparto de la mano de Federico Luppi, Juan Diego Boto y Eusebio Poncela, género drama.

Martin Hache habla de drogas, de relaciones tóxicas, de inmigración y también de sexualidad. Introduce el concepto de pansexualidad  abiertamente.

Hay dos diálogos que para mí son de cabecera, uno de ellos habla sobre la Patria, completamente extrapolable a cualquier nacionalidad. Exacerbar el patriotismo es una forma de mantenernos a la defensiva, en pie de guerra al extremo del fanatismo, un burdo ejemplo de ello es la Trumpmanía

  • Frase sobre Patria de la mano de Federico Luppi:

Eso de extrañar… la nostalgia y todo eso es un verso. No se extraña un país, se extraña el barrio en todo caso, pero también lo extrañás si te mudás a diez cuadras. El que se siente patriota, el que cree que pertenece a un país es un tarado mental; la patria es un invento. ¿Qué tengo que ver yo con un tucumano o con un salteño? Son tan ajenos a mí como un catalán o un portugués. Son estadísticas, números sin cara. Uno se siente parte de muy poca gente, tu país son tus amigos, y eso sí se extraña.

  • Pero además de este diálogo , reflexión sobre el Patriotismo, destaco «Hay que follarse a las mentes» a cargo de Eusebio Poncela. Donde expresa la raíz del amor que no es otro que enamorarse de las personas y no de genitales.
¿Y a ti  te ha dejado huella alguna película por sus diálogos?